Serán 21 las piedras que la entidad situará en 2025 en Lugo, Outeiro de Rei, O Corgo, As Nogais, Becerreá, Cervantes, O Incio, Viveiro y Ourol para honrar la memoria de las dobles víctimas del franquismo y del nazismo de la provincia
www.elprogreso.es / Nieves Neira / 25 de enero de 2025
Con motivo de la conmemoración del Día Internacional de las Víctimas del Holocausto, que se celebra este lunes, 27 de enero, la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) anunció la colocación de Stolperstein en nueve ayuntamientos de la provincia de Lugo para recordar los deportados lugueses. Si en la provincia fueron 39 las víctimas del franquismo y del nazismo, la entidad prevé situar este año esas piedras de la memoria en homenaje a 21 de ellos, una selección que se debe exclusivamente al avance de la investigación que en los últimos tiempos les permitió ir sabiendo de estos vecinos.
De momento, en Galicia, solo en A Coruña es posible tropezar con esta memoria por la calle, la memoria de estas personas que se exiliaron en Francia tras la derrota de la República y ya en el país vecino fueron también víctimas del pacto que el dictador español firmó con Pétain y Hitler para darles, como apátridas, el peor de los destinos en los campos nazis. En total, de Galicia fueron deportadas 200 personas, 39 en Lugo. Del conjunto del Estado fueron 10.000 las personas que sufrieron esta suerte.
Nueve ayuntamientos, 21 nombres
Las Stolpersteine se colocarán para Rafael Pardo Valles, de O Corgo; Aurelio y Vitorino Díaz Huertas, en Outeiro de Rei; Liberio Valí García, Balbino Santín Era y Octavio López Reymóndez, de As Nogais; Manuel Domínguez Núñez, Ramón Gómez López y Agustín Souto Vilares, de Becerreá; Casto Martínez Parada, de O Incio; Salvador Hierro Franco y Manuel Lamelas, de Viveiro; Manuel Pardo Pombar, de Ourol; Jesús López Digón, Octavio Arias González, Manuel Fernández Fernández, José Fernández Santín y José Fernández Pérez, de Cervantes; Benigno Castro Gandoy, Enrique Doval Reija y Francisco Otero Saavedra, de Lugo.

Octavio Arias González, uno de los deportados. EP
En la reconstrucción de la biografía de estos vecinos trabaja un equipo en Lugo de la ARMH coordinado por Miguel Freire. En muchos casos, la asociación ya consiguió establecer relación con los familiares. Sin embargo, aun andan buscando vínculos con los deportados de Cervantes Octavio Arias, de Vilar de Donís; Manuel Fernández, de Folgueiroa; José Fernández Santín, de San Miguel, y José Fernández Pérez, de Estremar. También buscan pistas familiares de Octavio López, de Vilabol, en las Nogais, y en Becerreá de Agustín Souto, de Nantín, y de Ramón Gómez, de Quintá de Cancelada.
Solo 16 supervivientes
De los 39 deportados lugueses solo sobrevivieron 16. La mayor parte fueron deportados a Mauthausen, y al subcampo de Gusen. Para la investigadora austríaca Martha Gammer, Gusen, para los republicanos españoles, supuso una sentencia de muerte. “Allí nadie debía sobrevivir más de tres meses, porque era un campo de exterminio por trabajo”, cuenta. Además, destaca que “los españoles eran especialmente odiados por ser considerados comunistas”. Por último, añade la tortura que supuso el frío extremo, “por lo que muchos enfermaron y fueron exterminados por no poder trabajar”.
Las Stolpersteine son una iniciativa para recordar esta memoria llevada a cabo por el artista alemán Gunter Demig. Hasta el momento están presentes en 1.200 localidades alemanas, y hay más de 100.000 repartidas en todos los países de Europa. Para Freire, “es importante recordar, y más ahora, en un panorama de proximidad con el discurso fascista”.
Fotografía destacada: La escalera de la muerte en Mauthausen. EP | Archivo:Bundesarchiv Bild 192-269, KZ Mauthausen, Häftlinge im Steinbruch.jpg